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El canadiense está de gira y su tour le está llevando por los mejores estadios de toda la geografía. Esta vez le tocó el turno de poder subirse a uno de los estadios más grandes e importantes del mundo: el O2 Arena de Londres, por donde pasaron estrellas como Madonna o Britney Spears.
Ahora él, convertido en otra estrella más, derrocha talento subido a su escenario. El cantante de Baby tuvo una telonera de excepción: Willow Smith, hija del actor/cantante/showman Will Smith, del que se ve que ha heredado el desparpajo y el saber meterse al público en el bolsillo. Smith con tan solo 10 años ha logrado un gran éxito con su single Whip my Hair. Ahora, y gracias a la magnífica oportunidad que Bieber le ha otorgado, puede recorrer el mundo de manos del sueño de toda adolescente. Pronto será ella la que necesite un telonero.