El cantante canadiense Justin Bieber y su exmánager Scooter Braun han llegado a un acuerdo definitivo que pone fin a una prolongada disputa financiera que involucraba decenas de millones de dólares y que había tensado su relación durante años.
La controversia principal se originó tras la cancelación anticipada del Justice World Tour, por el cual Bieber había recibido un anticipo de $40 millones de dólares por parte de la promotora AEG. Con la suspensión del tour, AEG exigió la devolución de $26 millones, cantidad que fue cubierta por Hybe, la empresa de Braun, con el compromiso de que Bieber la reembolsaría en un plazo de diez años.
Tras efectuar solo un pago, el artista interrumpió los abonos, generando una situación crítica.
Como parte del nuevo acuerdo alcanzado, Bieber ha saldado la totalidad de esa deuda, según confirmaron fuentes cercanas a ambas partes.
El acuerdo también contempla una reducción significativa de otra deuda reclamada por Braun, relacionada con comisiones impagas acumuladas a lo largo de los años. Aunque el representante estimaba la cifra en $11 millones de dólares, el arreglo permite que recupere solo la mitad, lo que representa una solución favorable para Bieber.
Una auditoría independiente realizada por la firma PricewaterhouseCoopers (PwC) había determinado que Bieber debía $8.6 millones adicionales en comisiones, pero Braun renunció al cobro de dicha cantidad, facilitando así el cierre del conflicto de manera amistosa.
Este acuerdo marca el fin formal de una etapa compleja entre ambas figuras clave del entretenimiento, quienes durante más de una década compartieron una exitosa trayectoria profesional.
La resolución del caso se vio impulsada, en parte, por el reciente documental de TMZ "¿Qué le pasó a Justin Bieber?", que arrojó luz sobre las verdaderas causas de la disputa y los datos financieros implicados.
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